Breve estudio del caducamiento

Para los que no comprendan el término, no se trata de la fecha de caducidad de los yogures, si no la nula o escasa predisposición a salir de casa. Sobre todo, se le llama caducamiento al hecho de quedarte en casa cuando hay disponible un plan con amigos. Entendemos que en un día de entre semana normal se concede amnistía con el caducamiento. El caducamiento tiene también sus grados, pues no es lo mismo quedarse viendo las galas de la tele en Nochevieja que acostarse temprano un viernes porque estás fundío de currar toda la semana. Hagamos entonces una escala de niveles de caducamiento, de menor a mayor grado.

 

Caducamiento nivel: gato en un cojín al lado de la lumbre.

 

-Caducamiento por nulidad: Se da cuando realmente no hay plan, todo el mundo está ocupado, todo el mundo se ha caducado o directamente no tienes amigos. Si realmente tienes ganas de salir no se consideraría caducamiento. Digamos que si tuvieras una mijilla de ganas de salir pero de pronto ves que nadie sale, en verdad piensas, bueno, pues hoy descanso. Se produce entonces un caducamiento por nulidad.

-Caducamiento en grupo: Se trata de quedar para un plan de tranquis como ver una peli, juegos de mesa o echar vicio. No es un caducamiento serio ya que implica sociabilizar, y tampoco van a ser todos los días de jolgorio y bacanales.

-Caducamiento parcial: Se produce cuando realmente sí sales, pero te retiras a mitad de la noche. Este tipo de caducamiento puede agravarse si se realiza con bomba de humo (irse sin avisar, como los ninjas).

-Caducamiento justificable: Son los que se dan por enfermedad, por tener curro al día siguiente o no tener muchos dineros. Son caducamientos perdonables, pero también existen animales de la fiesta (llamadme exquisito pero aquí me suena mejor el término en inglés “party animal”) que han llegado a darlo todo teniendo 40 grados de fiebre. Leyendas los llaman.

-Caducamiento en pareja: Te quedas en casa porque puedes, y al final seguramente termines la noche mejor que tus compañeros solteros.

-Caducamiento por acumulación: Cuando llevas ya muchos fines de semana sin parar, a veces apetece quedarse un día en casa para recuperar fuerzas.

-Caducamiento sincero: Se da en personas que normalmente salen, pero ese día, por lo que sea, no les apetece.

-Caducamiento por planchar camisas: Recibe su nombre por una excusa real que fue dada para no salir, “no salgo porque no tengo ninguna camisa planchada”. Se trata de caducarse dando cualquier excusa barata: cumpleaños de familiares que curiosamente se dan varias veces al año, eventos ineludibles inventados, visitas de un familiar que nadie conoce…

-Caducamiento reincidente: Dejando a un lado personas que realmente sean introvertidas (que no tímidas), este tipo de caducamiento se da en personas que, por algún motivo, se quedan en casa más veces de las que uno puede contar. Pueden tener un problema más severo que necesite ser atendido por un profesional, pero si se trata de un caducamiento que se repite varias noches en un individuo mentalmente sano, se considera de una alta gravedad.

Este artículo no pretende reprender a ninguna persona caducada, sino ser una reflexión porque me aburro. Si alguien se da por aludido es su problema.

 

Concurso de caducamiento.

 

El kebab, esa comida infame

Borbotones de salsa yogur con un tono blanquecino poco apetecible. Un solo rollo dando vueltas pero 3 tipos de carne en el menú. Un local cutre pero sin encanto. Te encuentras en un kebab, o shawarma, como se le conoce en algunos sitios. Nadie fuera de mi pueblo o Granada me ha entendido cuando he dicho shawarma. He aquí las diferencias:

http://www.cocinatis.com/comer/sabes-diferenciar-doner-kebab-durum-tranqui-explicamos_2014072957da85c50cf2f66f47e28901.html

Se empezó a popularizar en España hará unos 15 años y rápidamente se sobrepuso a otras comidas rápidas como las hamburguesas. La primera vez que vi el rollo de carne dando vueltas no me causó buena impresión y parece que esa imagen de un trozo deforme de chicha al que le rascan con esa herramienta que parece una radial se ha quedado grabada en mi mente. Fui bastante escéptico la primera vez que lo probé pero desde entonces tengo una relación de amor-odio con los kebab.

La foto en verdad es por una protesta por no se qué movida con los kebabs que pasó en Rusia.

A uno le entra mono de pizza, chuletillas de cordero e incluso de lentejas bastante a menudo. El antojo de kebab a mí me suele dar cada 2-3 meses y vuelve a desaparecer tras probar medio kebab. El ansia de kebab se va disipando con cada bocado de ese conglomerado de carnes empachoso e insalubre. Hoy en la cantina de mi oficina sólo quedaba kebab a la hora que he llegado, o sea que ya no me toca otra vez hasta después de Navidad. No, esas veces que te entra el lobazo al salir de fiesta no cuentan.

Cosas deliciosas que te puedes encontrar en un kebab. En verdad os estoy haciendo un favor enseñándola.

Relataba mi amigo tijoleño el Salva, que uno de sus amigos en una de sus borracheras fue al “showarmero mágico” en algún lugar indeterminado de Granada. Dicho shawarma, showarma, kebab o como pollas sea, supuestamente estaba delicioso. Posteriores incursiones en terreno pedroantoñero (es una de las zonas de pubs de Granada) nunca hallaron tan mítico lugar. Sí que se hallaron en cambio ulcerantes dolores de barriga tras el testeo de algunos de estos establecimientos de dudosa reputación.

He encontrado un poco de carne en mi plato de cartón y esparto.

Vale, seamos honestos, algunos de estos lugares llegaban a un nivel decente, pero desde mi época de estudiante en Granada nunca volví a probar un kebab que me dejara satisfecho. Durante mi estancia en Belfast probé varios kebab sin suerte. Eran especialmente infames unos kebab que había cerca de un conocido pub, el Laverys. En la entrada de los mismos se podían ver carteles de 2 por 1, tentando a guiris y no tan guiris a aplacar el hambre que dejaba la ingesta de cerveza irlandesa. Había un local que hacía “el mejor kebab de Irlanda del Norte” que tenía hasta premios y tó, pero no era un kebab al uso. Y sólo me gustaba a mí al parecer, ya que recomendaciones del sitio fueron infructuosas y me labraron mala fama de crítico de cocina, no así de cocinero. El vídeo que os pongo debajo es de una tía ultra ansiada por comer kebab justo enfrente del Laverys de Belfast. Vedlo hasta el final, no tiene desperdicio.

Otra historia mítica de kebabs trata de un glotón amigo nuestro (se dice el pecado pero no el pecador, aunque sea una historia bastante extendida). Se le propuso un reto: el grupo de amigos pagaba 10 kebabs si se los comía todos. En caso de plantarse a medio camino de tal opípara bacanal, él se haría cargo de la cuenta y los amigos comerían los kebab restantes. Ni que decir que fue una propuesta demasiado ambiciosa para el colega, que se quedó al final del quinto. Aunque hay que decir en su, ehm, defensa, que ese mediodía tuvo una importante comida familiar que ocupó su casi insaciable estómago.

Venga, una imagen para que veáis que los kebab también tienen su lado bueno.

Del mismo glotón (seguramente la próxima vez que nos veamos acabará escupiéndome en la sopa) surge otra historia de gula y exceso. A todos nos gustan las pizzas (incluso a algunos nos gustan con piña). ¿Qué se le ocurrió a nuestro entrañable amigo? Efectivamente, echar la carne del kebab por encima a una pizza. No, no era un lahmacun, era un engendro de la gastronomía.

Me decía mi amigo alemán que cuando me viniera a vivir a Alemania iba a saber lo que era un verdadero kebab, ya que esto está plagado de turcos y tal. Tras 10 meses viviendo en Frankurt, aún no he probado uno decente. Hay numerosos debates sobre la salubridad del shawarma pero el resultado creo que queda claro. El kebab queda relegado pues a comida de borrachera a altas horas de la madrugada o a cena de hombre soltero con pocas ganas de cocinar.

Modas que no entiendo

Quería titular el artículo como modas estúpidas pero he de asumir que habrá gente que se ofenda y sí considere estas modas como algo normal.

Ya en mi blog sobre Belfast hablé sobre la manera en que las chicas van maquilladas (cejas pintarrajeadas, bronceado falso, maquillaje excesivo...) pero lo que voy a tratar aquí es algo que también observé en España la última vez que fui.

Todo el mundo ha oído ya hablar de la moda hipster (exuberantes barbas, gafas sin cristal, un toto como Bale el jugador del Real Madrid). A pesar de que es un estilo que está dejando de ser común a esa tribu urbana, extendiéndose ya a más gente, yo quiero comentar ciertas modas que se ven más en personas, llamémoslas “normales”, que no tienen una pertenencia exacta a un grupo específico (aunque si me preguntas a mí te diría que es gente tirando a pija).

Typical belfaster girl

-Gorros de lana: 30 grados a la sombra. El horizonte ondula cuando miras a lo lejos. Las barandillas de metal queman al contacto. Los albañiles trabajan sin camiseta. Y aún algunos insensatos llevan puesto un gorro de lana en la cabeza. Soy yo en invierno, que además tengo poco pelo ya, y me hierve la cabeza cuando llevo un gorro más de 5 minutos. ¿Es que esta gente tiene insensibilidad en la cabeza? ¿Algún tipo de lesión cerebral? ¿Llevan estos gorros para ocultar alguna deformación seria? He de admitir que a algunas muchachas les queda bonico el gorro, pero colega ¿por qué llevan gorro de lana si luego van en manga corta y con shorts?

 

Miradme, soy un moderno

-Pantalones rajados: Ésta es una moda que lleva ya varios años, pero últimamente se ven concretamente rajas en las rodillas. Cuando yo era pequeño me desollé los pantalones varias veces, principalmente con caidas yendo en monopatín. Llegando malherido a casa, a mi madre no sólo no le importaba un carajo mi condición física, si no que además recibía una severa reprimenda por haber roto los pantalones. Cuán afortunado sería si esta moda hubiera sucedido hace unos pocos lustros. Me habría quedado sin rodilla pero mi madre podría estar tranquila que su niño tendría un armario con ropa impecable. Las razones que se me ocurren para llevar los pantalones así es disponer de un respiradero, que en verano viene bien, oye. Pero luego comprendes que el ser humano es un animal ilógico y ves a la gente llevando esos mismos pantalones helados de frío en invierno.

 

Pantalones modelo queso gruyere

-Pantalones ajustados en hombres: Los pantalones ajustados en hombres quedan fatal. Antes de acusarme de sexista, atended a mis razones. Una chica con pantalones ajustados se siente guapa y a la vez a los hombres nos gusta mirarlas, decidme que no. Incluso otras mujeres mirarán a esa otra y pensarán que le quedan bien. No ocurre eso en los hombres. El bendito precursor de modas que se puso unos pantalones ajustados pensaba que le quedaban bien. Incluso algunas chicas se fijarían que esos pantalones le marcan una buena paquetada. Pero ¡horror! Este esperpento causará repugnancia en otros hombres. Y eso es lo que siento yo, animadversión de ver esas patillas finas embutidas en tela, esos pantalones que tienen que ser incómodos del copón, que no contentos con llevarse ajustados además vienen en colores chillones. Todo muy trending, muy fashion. Matadme, por favor.

 

Como si no llevara nada, llevara nada...

-Ropa de marca: Esta queja admito que es totalmente algo personal. Directamente no me gusta la ropa de marca. Es cara y en pocas ocasiones ofrece realmente una calidad superior a ciertos ropajes que puedes encontrar ya no en mercadillos, si no en tiendas de moda más modestas. Por citar algunas marcas de moda: Abercrombie, Tommy Hilfiger, Hollister, Superdry. Las zapatillas (o tenis como los llamamos en mi pueblo) tienen que ser Converse. Y ya no me voy a otras más pijas como Ralph Lauren, Lacoste o Versace. Cuando empezó a gustarme el rock y el metal y comencé a llevar camisetas de grupos me decía mi madre que además de que eran feas, que iba haciéndole propaganda al grupo de gratis. Pero claro, si llevas ropa de marca ya no les haces propaganda, estás siendo cool. Gironías de la vida. Si llevando camisetas de éstas que ponen cosas random en inglés que la gente en España no se fija ya vas bien. Por ejemplo que ponga College City of Wherever, Established 1987. O ropa sin textos, como camisas de rayas y cuadros y arreando.

 

Ninguna moda superará a la de nuestro Edu

La adicción a los móviles

No es novedad decir que en la sociedad actual estamos demasiado enganchados a los teléfonos móviles. Es un tema que me preocupa, siendo yo informático y aficionado a los videojuegos. Recuerdo mis tiempos mozos en los que tener una Game Boy era un privilegio, pero siempre tenían prioridad los juegos tradicionales: el escondite, el pilla-pilla, el quema, pachanguillas de fútbol, jugar con las palas en los descampados, hacer cabañas con palés... No pretendo hacer de éste un post de añoranza de la infancia pero sí comparar a como estamos ahora. Vivimos en la era de los nativos digitales, dónde tu abuelo te pide que le adelantes el reloj cuando cambia la hora pero tu sobrino recibe una tablet como regalo de la comunión.

Me llaman friki por jugar a la Play pero sí que está socialmente aceptado que una persona saque el móvil en una reunión de amigos para jugar al Candy Crush. Las cenas de Navidad se han convertido en una competición de cuñados de ver quien enseña la imagen más graciosa. Sentimos malestar cuando estamos fuera de casa y la batería baja del 15%. La gente cruza la calle sin mirar más que a su móvil. Es un tema bastante preocupante, que me hace temer si poco a poco el ser humano perderá la habilidad de comunicarse oralmente para dejar paso a una excelente habilidad dactilar que permita decenas de palabras escritas por minuto.

 

Carril móvil en China

Los smartphone son por supuesto una herramienta bastante útil. Google Maps me ha permitido orientarme en mi reciente viaje a Nueva York (adiós a esos engorrosos mapas de dificil plegamiento). Con Spotify y Youtube tengo a mi disposición cualquier canción que se me ocurra en unos segundos (recordad esos tiempos que grababas canciones de la radio en casette y rezabas porque el locutor no hablara). Whatsapp permite comunicación instantánea además de la posiblidad de compartir archivos multimedia.

Así se ha perdido la romántica tradición de llamar al timbre de casa. ¡Que ilusión aquellas visitas inesperadas en las que tu vecino te tocaba a la puerta para salir a jugar! A día de hoy me han llegado a hacer una llamada de Whatsapp para decirme que abra la puerta de casa. Luego hacíamos esas llamadas telefónicas simplemente por saber como va la cosa. Pensadlo, antes no podíamos cazoletear que estaban haciendo nuestros amigos en Facebook, ni teníamos el grupo de Whatsapp en el que un bienaventurado propone el plan del finde. ¿Cuando fue la última vez que llamásteis por teléfono (no llamada de Whatsapp ni Skype) a un amigo por el simple placer de saber cómo le va?

 

Phone Stack. El primero que coja el móvil se paga una ronda.

Las dos situaciones que más me preocupan son dos: gente caminando por la calle mirando el móvil y reuniones de amigos todos celular en mano. Caminar con el móvil es peligroso. No sólo te puedes comer una farola, si no que como decía arriba, la gente cruza la carretera sin mirar siquiera, quizá seguros por no oir el motor de un coche. Yo uso bici y más de una vez he tenido que pegar frenazo por no atropellar a un intrépido peatón. El tema de las reuniones de amigos mobilísticos es más un problema social. Está bien revisar en un segundo el Whatsapp que te ha llegado, particularmente si no es de un grupo, pero ponerse revisar el Facebook enfrente de tus amigos cuando hay una conversación activa me parece la más clara y a la vez sutil forma de indicar que no te importa una polla de qué se está hablando. Fijaros cuando vayáis por la calle y asomaros a las cafeterías para comprobar como de invasiva está siendo esta afición a mirar el teléfono en cualquier lugar. Así que si estás leyendo esto en presencia de tus amigos, recuerda que el smartphone solo se debe usar cuando esperas al autobús o cuando estás sentado en el váter.

Y para terminar os paso un enlace con 20 imágenes que dan bastante que pensar:

http://www.gq.com.au/lifestyle/art+design/galleries/20+satirical+illustrations+that+highlight+social+media+addiction,37839

El sectarismo de Apple

No es ninguna novedad si os digo que la obsesión por la tecnología está llegando muy lejos. El los últimos 10 años han ido apareciendo una serie de aparatejos tecnológicos: tablets, monitores de actividad, realidad virtual, todo lo que sea inteligente, smart (SmartTV, smartphone, smartwatch, smartpollas). Tanto que ya se ha hecho el chiste cientos de veces de que el dispositivo en sí es más “inteligente” que el usuario en algunas situaciones. Se ríen los modernitos pensando, fíjate, todo lo que hacías con una cámara de video y fotos, televisión, VHS, ordenador, MP3 y teléfono lo puedes hacer en un iPhone. Me río yo ahora de los que se han gastado un dineral en todas las variantes de Apple: Mac, iPad, iPod, iPhone, Apple Watch, Apple Pencil.

En un punto en el que la línea entre una tablet y un móvil es muy delgada (vean la diferencia de tamaño de un iPad Mini y un iPhone 6 Plus), me pregunto ¿qué pedazo de campaña de márketing ha hecho que el dispositivo tecnológico más vendido de los últimos años sean las tablet? Soy informático y bastante friki de la tecnología y aún no veo ni un argumento a favor de comprar una tablet. Se queda en un punto intermedio entre un ordenador y un móvil, sin ofrecer nada realmente nuevo. ¿Cómo han podido crear la necesidad de comprar una tablet entre los consumidores?

 

iPad Mini versus iPhone 6 Plus

 

El único argumento que medio me convence es el llevar la tablet en viajes largos, para ver películas. Argumento que queda invalidado en mi caso, ya que llegaré a coger el avión 4 veces al año como mucho. Para tareas serias de oficina, como redactar texto, diseño web, editar imágenes, o de nuevo ver pelis, o jugar, prefiero el pragmatismo de un teclado y una pantalla grande. Para cosuchas como ver el Facebook mientras estoy sentado en el trono, ver 4 videos graciosos y enviar Whatsapp, ya tengo mi smartphone Android. Las tablets se quedarían entonces en un limbo, que, pese a ser bastante ligeras de transportar, palidecen en portabilidad con los móviles y se alejan de la comodidad de un teclado y una pantalla grande de los ordenadores portátiles (aunque ya venden híbridos de laptop/tablet, no me convencen por la escasa potencia).

 

La mejor utilidad que encontrarás para una tablet. Cortar tomate para hacer gazpacho.

 

No hablemos ya de los SmartWatch, que ofrecen lo mismo que un SmartPhone (de hecho algunos requieren conexión para poder funcionar) sólo que en tu muñeca y en una pantalla mucho más pequeña. ¿Utilidad de estos aparatos? Ahorrarte sacar el móvil del bolsillo cuando te escriben un OK en el Whatsapp. Me quedo con el Casio de toda la vida.

 

Hasta Bin Laden tenía un Casio de los de toda la vida

 

Voy a meterme ahora un poquito con los Apple maníacos. Primero empecemos con las ventajas: es cierto que Apple tiene un servicio de atención al cliente muy bueno y que el sistema tiene mayor estabilidad que dispositivos con Android o Windows. También los aparatos son más duraderos que la media de la competencia. Que para diseño gráfico le sacarás bastante partido. Y que lucirás una bonita manzanita en la parte de detrás de tu cacharro. Y ya está.

Me compré un BQ hace poco que tiene, en números (procesador, memoria ram, gráfica, resolución), mejores prestaciones que un iPhone 6S. Y me ha costado menos de la mitad que el último iPhone. Además de un elevado precio, los sistemas iOS están limitados por ejemplo para pasar música (hay que hacer una serie de chanchullos para poder música sin usar iTunes) u otras limitaciones de compatibilidad para según que apps (no me extraña ya que el 75% del mercado los móviles son Android y un 15% iOS. Sale más a cuenta programar para Android).

 

Esta imagen ya es bastante antigua pero no iban mal desencaminados. Obviando el hecho de que Steve Jobs murió en 2011.

 

Total, que si eres un usuario standard (sólo usas Whatsapp y 4 apps sueltas), que te gastes un dineral en un iPhone es un despropósito a no ser que sufras de snobismo crónico y te guste fardar. Porque al fin y al cabo el fan de Apple es eso, un tipo de persona que se obsesiona con las apariencias, que paga más por el producto para tener un prestigio social adicional. Que cada año se compra la revisión del iPhone pertinente a pesar de que su iPhone anterior sigue funcionando perfectamente. Si bien es cierto que los móviles que quedan desfasados más rápidamente que un ordenador(en 6 años tengo ahora mi tercer smartphone porque tampoco adquirí últimos modelos en su día). Sobre todo móviles de hace 3 ó 4 años que no tenían memoria interna suficiente para tener siquiera el Whatsapp y el Facebook instalado. Te hablo cono informático en modo cuñado: no compres nunca un iPhone. Por el dinero que vale no merece la pena.

Parecidos razonables

Abrimos este artículo con una foto ya antigua (agosto de 2007), la evolución del Girón. Años después descubrí que se llama Pablo y es el novio de la MC. Aunque sean más o menos igual de altos, el Pablo en esta foto parecía verdaderamente la evolución del Girón. En la actualidad están más o menos parejos.

verano11

Este parecido se lo sacó el propio Girón. El baloncestista se llama Nando de Colo, francés que juega en el Valencia Básket (sí, esto último lo he deducido yo solo). Sería como una versión fea del Antonio Miguel.

parecidosam

Algunos aseguran que también podría ser una fusión del Antonio Miguel y del Antonio Carlos.

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Otro parecido, que más bien es algo inducido por el nombre, es CR. No se trata de Cristiano Romualdo, sino del Cristian Rubén. Cristian + Rubén. En este caso, Cristofer + Yairon. Juzgad vosotros mismos. Y hubo una noche que estuvimos en el ferial en el que vimos una cosa aún más brutal. Se trataba de una fusión del Cristian Rubén, habiéndose fusionado previamente el Cristian con el Girón, añadiendo al final al Antonio Carlos. Era realmente brutal, el Tony puede dar constancia. Lástima que de este no disponga fotos.

 cristianruben

Y dejo para el final el parecido más brutal. De hecho tuve que esperar confirmación del Monchu para asegurar que realmente no era él. El avistamiento lo hizo el Álvaro (hermano del Marcos) en el catálogo de disfraces del Juguetoon y fue posteriormente subido al tuister por el Yairon.

parecemonchuSi tenéis más parecidos no dudéis en decírmelo para ver si sale un segundo artículo.

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